Conducir nos da libertad, independencia y la posibilidad de ir a donde queramos, pero para muchas personas, solo pensar en ponerse al volante les provoca ansiedad, bloqueo o incluso ataques de pánico. Este problema se llama amaxofobia o comúnmente conocido como fobia a conducir y aunque puede ser muy limitante, tiene solución. https://www.lavanguardia.com/motor/consejos/20230619/9045733/que-amaxofobia-como-puedes-perder-miedo-conducir-pvlv.html
¿Qué es la fobia a conducir?
La amaxofobia es un miedo intenso e irracional a conducir un vehículo. Puede aparecer de diferentes formas:
- Miedo a conducir por autopistas o túneles.
- Ansiedad anticipatoria al pensar en una futura conducción.
- Evitación completa de situaciones relacionadas con el coche.
A veces surge tras un accidente, pero otras veces no hay un motivo claro. La mente asocia conducir con peligro y se activa la alarma, aunque no haya una amenaza real.
¿Qué siente alguien con fobia a conducir?
Muchas personas con fobia a conducir experimentan síntomas físicos y mentales muy intensos. Es común sentir palpitaciones, sudor, tensión muscular, mareos o la sensación de que se van a desmayar. En lo emocional, aparece el miedo a perder el control, a provocar un accidente o quedarse bloqueado en mitad de la carretera. Todo eso suele ir acompañado de pensamientos como: me va a dar un ataque, voy a provocar un accidente, esto es peligroso. Estas sensaciones pueden ser tan intensas que terminan condicionando la vida cotidiana: dejar de trabajar, evitar viajes o depender de otros para todo.
Es importante saber que este miedo no es para siempre, se puede trabajar y superar con ayuda y los pasos adecuados. Aquí te doy algunas pautas simples y eficaces:
- Primero, trabaja la ansiedad: antes de enfrentarte a la conducción, es importante aprender a manejar la ansiedad general. Algunas herramientas útiles:
- Respiración diafragmática: lenta, profunda y por la nariz.
- Mindfulness o atención plena.
- Ejercicio físico regular.
- Evitar cafeína y estimulantes si aumentan tu nerviosismo.
- Identifica tus pensamientos automáticos
Apunta qué pensamientos te asaltan cuando piensas en conducir. Por ejemplo:
- Me voy a quedar bloqueado en medio de la carretera.
- No voy a saber reaccionar.
Luego, reformula con otros más realistas:
- Estoy aprendiendo a manejar esta situación, paso a paso.
- Puedo ir acompañado/a y parar cuando lo necesite.
- Exposición progresiva: uno de los métodos más eficaces es la exposición gradual. Consiste en enfrentarte poco a poco a la situación que te genera miedo, empezando por los niveles más bajos de ansiedad. Ejemplo:
- Sentarte en el coche sin arrancar.
- Arrancar y estar en parado.
- Dar una vuelta a la manzana.
- Ir por calles conocidas, en horas tranquilas.
- Probar trayectos más largos o autopistas.
Cada paso se repite hasta que te sientas cómodo. No hay prisa, lo importante es avanzar a tu ritmo.
- Busca apoyo emocional y/o profesional
Practicar con una persona que te dé seguridad o acudir a un psicólogo/a especializado en ansiedad o terapias cognitivo-conductuales. También existen autoescuelas especializadas en ayudar a personas con amaxofobia.